lunes, 25 de enero de 2010

Mexico-Irlanda-Irlanda-Mexico


Durante un par de meses he estado pensando en una entrada para este blog, en la cual además de mencionar las similitudes del pueblo Irlandés con las del pueblo Mexicano (temas ya tratados con intelectuales de alto fartaje y pistiaje en diversas ocasiones), donde también de pasadita haga mención sobre mi muy poco ortodoxo sentido de nacionalidad e identificación con lo Mexicano(como escribir Mexicano con m mayúscula), denostando los símbolos (predominantemente abstractos) típicos de nacionalidad, optando por lo mas tangible y aparentemente trivial.

No obstante el tener en cierto orden estas reflexiones este post no es sobre eso, bueno es y no es. En lugar de conjeturas y conclusiones sobre estos vínculos México-Irlandeses, voy a predicar con el ejemplo (solo esta vez) y tomare algo, sino trivial absolutamente mas tangible(y digerible) que una perorata de esas que acostumbro.

De que chingados estoy hablando se preguntaran ustedes lectores(3 como mucho y seguramente en drogas, perdón, el seguir este blog lo sugiere). Pues resulta que en uno de estos días, estando detrás del mostrador de un café Mexicano en Irlanda un cuate con cara de bonachón y cara de Irlandés entra y me empieza a hablar en un español muy fluido (español mexicano, perdón, Mexicano), lo cual me pareció por demás grosero estando yo switcheado en inglich mode.

Mira que cabrón, pensé, me dejó con el Hi, how are you? en la boca y pues me tuve que improvisar un quiobo carnal. Ya estando yo en spanish mode y sintiéndome más dueño de la situación me dispuse a escuchar lo que un Irlandés con español Mexicano tenía que decirme.

Pues resulta ser, que esta persona llamada David resulta ser un músico que por azares del destino y la globalización terminó formando una banda llamada Simplifires junto con otros 3 Mexicanos y que después de 3 años en el DF venía a promocionar su reciente disco llamado "Why people make countries". Después de unos Ohh, que chingón, y que buen pedo, me pasó una copia del disco, para que la escuchara.

Asi que después de la labor diaria, regrese a casa dispuesto a cumplir mi palabra y me eché el disco de cabo a rabo y de una sola sentada, con toda la intención de reseñarlo en mi blog ya fuera para recomendarlo o por el contrario para evitarles un mal viaje a mis lectores (3 y en drogas), asi que dicho lo anterior ahi les va:

Interesante muy interesante, no me gustaría meterme en terrenos peligrosos y empezar a nombrar influencias y parecidos, y no lo hago simplemente por que sería muy mamón de mi parte. Suena muy fresco, la voz de mi buen David muy singular y poderosa, mucha guitarra distorsionada, auténtico, sin tanta elaboración y virtuosismo efímero, además me gustó el uso que hicieron de sintetizadores. Un disco muy divertido y no por eso falto de esencia.

Me imagino a estos cuates en el ensayo echándose unas Guinness y tirando desmadre, de hecho a eso suenan, a una peda con Guinness y Victoria en uno de esos estudios de Temple Bar. Que no se trata el Rock de eso??

Aquí dejo un videito




Al diablo!!! Estos cuates suenan como a Los Strokes y a We are scientists echandose a Bono en sus mejores tiempos, y believe it or not eso es un cumplido.

jueves, 21 de enero de 2010

Las batallas


“Oye Carlos, porque tuviste, que decirle que le amabas a Mariana.”

Rings your bell??

La famosa canción de Café tacvba: Las batallas (Con el titulo de “oye Carlos” para algunas descargas de mp3), se inspira precisamente en el libro de José Emilio Pacheco llamado “Las Batallas en el desierto” libro que además de hacer un retrato de la Ciudad de México en aquellos distantes años 50, relata la historia del amor mas puro el cual por inusual, es visto como una abominación.

Carlos conoce a la mamá de su mejor amigo, Mariana. Como lo cuenta él, a pesar de saber la imposibilidad de su amor, sede ante la necesidad de confesar su amor aun yendo en contra de todo lo racional. Claro, como era de esperarse, su acto de valentía y honestidad desata toda una serie de reacciones en contra de su enamoramiento. Carlos nunca entendió por que la gente desaprobaba el más honesto e inocente de los amores.

Por otro lado tenemos a Oliveira, personaje de la novela de Cortazar: Rayuela, quien en protesta a las convenciones sociales escoge la renuncia en lugar de la acción, librándose de ese “orden fariseo”, sumergiéndose en una “fiaca sistemática”, es decir escoge no pelear ninguna batalla, dejándose llevar por La Maga hasta cierto punto.

Ajustando el triunvirato están todos aquellos que (sin hacer juicio de ello) pelean las batallas que pueden ganar (o al menos lo creen) acumulando con el tiempo triunfos, justos todos ellos. Si bien a veces pierden, siempre queda en el paladar algo del sabor de las victorias pasadas y a su vez se apuntala esa habilidad de seleccionar las batallas a pelear.

Por supuesto, todos estos son ejemplos extremos, y es posible maniobrar por todos estos campos de batalla. Todos tenemos nuestras batallas perdidas de antemano, todos hemos escogido nuestras batallas ganadas y a la vez hemos renunciado a pelear en mas de una ocasión.

A que viene toda esta perorata? En realidad no lo se del todo, por un lado pienso en las batallas que he ganado, pienso que fueron bien escogidas. Me vienen a la mente también infinidad de batallas a las que he renunciado. Pero a la hora de estudiar esas batallas perdidas de antemano solo puedo pensar hacia delante.

No recuerdo alguna batalla de antemano perdida, al parecer solo he renunciado a pelear. He dejado las victorias para el comienzo y dejado para el final, con broche de oro, la escalada. Como yendo colina arriba después de una suave pendiente en bajada, como una campana gaussiana invertida. Se acercan tiempos de perder (¿o triunfos memorables posiblemente?) es decir, pelear a sabiendas de la inminente derrota, me veo en el futuro peleando en desventaja, y en su mayoría contra molinos de viento producto de mi obstinación y obsesión por ciertas cosas y personas.

O talvez…

Talvez solo soy un pesimista empedernido.

domingo, 10 de enero de 2010

Recuento de los daños


El fin de año es la excusa perfecta para que todos los melómanos hagan sus recuentos sus "top tens", sobre todo aquello relevante y digno de ser recordado en cualquier ámbito, generalmente en las cuestiones de la del arte y el entretenimiento. Y como a mi tambien se me da eso de la melomanía pues aquí va mi trágico recuento de todos los conciertos que por mi condición de estudiante pobre desempleado no he podido asistir. El orden de los factores va de acuerdo a su trascendencia de menor a mayor.

1.- The kooks. Se presentaron en The academy como parte de los festejos de el 250 aniversario de la cervecería Guiness.
2.-Cold play. Se presentaron e el Phoenix park un día de septiembre cuando recien estaba desembarcado.
3.-Kasabian. Buenisimos, se presentaron también con motivo de los festejos de la famosa cervecería, todos los boletos para esos conciertos fueron agotados con meses de anterioridad.
4.-Placebo. Alguién me dijo que esta banda era justamente como su nombre lo indica, en algún momento se perdieron estos muchachos.
5.- The Artics Monkeys. Estrenando disco, me los perdi, tenía muchas ganas de ver a estos tipos de Sheffield Ingaterra con su indy garage rock.
6.-Muse. El haberlos visto en vivo solo me dejo con una necesidad de ver otra vez a esta energética banda cons talentoso glam/rocker/pop satr Matthew Bellamy
7.Prodigy. Casi compro el boleto para este....
8.-Elbow. Tocaron el mismo dia que colplay, aunque creo que si hubiera honor alguno cold play le tendría que abrir a esta superbanda, me moría de ganas de ver si su musica en vivo es tan inmediata como en sus discos. Tambien para escuchar de primera mano esa frase que me gusta mucho: "Straight to my head like the first cigarrette of the day"
9.-REM. Además de ser los ídolos de los mismisos Radiohead sobran razones para arrpentirme de haber dejado la oportunidad de ver a estos tipos.
10.-Paul McCartney. Que mas se puede decir.

Como podemos ver fue un buen año concerniente a lo musical, veremos que nos trae este proximo año........